En un contexto donde el acceso al agua potable es uno de los grandes desafíos globales, una startup chilena está marcando la diferencia con innovación local. Se trata de Remote Waters, empresa tecnológica fundada en Algarrobo en 2018, que desarrolla sistemas de purificación de agua de rápida instalación, ya en funcionamiento en comunidades con acceso limitado a este recurso vital.
Lo que comenzó como un proyecto familiar hoy suma presencia internacional y más de 20 proyectos implementados en tres países. Su modelo integra diseño, instalación y mantenimiento de soluciones adaptadas a lugares donde el agua potable escasea.
“El agua limpia y segura debe ser un derecho, no un privilegio. Nuestro objetivo es que la tecnología llegue de manera práctica y amigable con el medio ambiente a quienes más lo necesitan”, afirma Pablo Cassorla, CEO y fundador de Remote Waters.
El reconocimiento más reciente llegó en Aster Demo, programa de la aceleradora Aster en Antofagasta, respaldada por Escondida | BHP. Allí, Remote Waters fue seleccionada entre las startups ganadoras, obteniendo un financiamiento de US$20.000 para potenciar su crecimiento.
“El respaldo de Aster no solo valida nuestro trabajo, sino que nos entrega las herramientas y redes necesarias para escalar. Además, nos permite contribuir en el norte del país, ayudando a la industria minera a reducir su huella hídrica y reemplazar camiones aljibes por soluciones de reúso más sostenibles”, agrega Cassorla.
Actualmente, la compañía ya trabaja con proveedores en la zona norte y proyecta ampliar su modelo de franquicias a nuevos mercados, junto con abrir líneas de negocio en auditorías hídricas y soluciones para proyectos inmobiliarios.
Con este nuevo impulso, Remote Waters reafirma su propósito: transformar la manera en que comunidades y empresas acceden a agua potable, en un escenario donde la escasez hídrica exige respuestas concretas y escalables.